domingo, 17 de enero de 2010

VISITA DE HERMANOS LUTERANOS

Cuando me disponía a entrar a la eucaristía dominical, una sorpresiva llamada telefónica originada por la Rev. Marisol Díaz, a quien le había llegado la carta del P. Héctor Cuadrado testimoniando su visita a Puerto Príncipe, Haití, y que le motivó a buscarnos, hizo que cambiara mi rumbo, para dirigirme a la oficina de PROMICLA en Casa Misión Claret, Bayamón, Puerto Rico.

Allí recibí a unos hermanos luteranos de las Iglesias Evangélicas Luteranas, San Marcos de Guaynabo y De la Epifanía de Rexville, acompañados de sus Pastores, la Rev. Marisol Díaz y el Rev. Wilfredo Aponte.

Han traído para nuestros hermanos haitianos, alimentos, agua, frazadas entre otras cosas, además de una ofrenda monetaria. En adición, la ofrenda especial económica de una familia judía que nos dijo: "Aunque no somos cristianos, tenemos corazón".

Luego de que fueron acomodadas todas las cajas, pasamos a tener una pequeña celebración improvisada y espontánea, con la participación de alrededor de 20 hermanos luteranos y yo, la única católica, seglar claretiana. Comenzamos con una lectura del Apóstol San Pablo. Oramos juntos, cantamos, pedimos por nuestros hermanos haitianos, y también dimos gracias al Dios que despierta en nosotros la sed de Compasión, Consuelo y Solidaridad.

Fue una celebración ecuménica, hermosa, motivada por el amor al único Dios, Padre de todos.
Hoy no pude participar de la Eucaristía católica. Pero comulgué con Cristo en la catolicidad de su Espíritu que me trajeron mis hermanos separados.

En nuestras oficinas no quedó solo una pila de cosas...quedó mucho amor, quedó LA ESPERANZA.

Nancy Burgos, sc.

2 comentarios:

  1. Solas las 12:00am y me disponía después de una jornada de trabajo gratificante a descansar, pero, para mi alegría me encontré con mi hermana y amiga Nancy Burgos, Seglar Claretiana, la cual comenzó a comentarme su experiencia y el trabajo que PROMICLA está realizando a beneficio de nuestros hermanos de Haití. Encuentro que finalizo leyendo esta bella noticia.
    Ciertamente Nancy como lo dice José María Vigil “La Iglesia ni son todos los que están, ni están todos los que son” en este instante de nuevo soy consciente, que el Jesús de Nazaret que los claretianos y claretianas me ha ayudado a conocer se manifiesta en todas partes y en todas las personas, por lo que hoy la solidaridad no reconoció fronteras, raza, ideologías ni religión. Ojala que podamos al igual que nuestros hermanos Luteranos “Encontrar el corazón” y trascender a los ritos religiosos en lo que como cristianos podemos perdernos y sobre todo nos permita sensibilizarnos ante el dolor de nuestros hermanos haitianos, rompiendo cualquier rastro de indiferencia, comodidad y confort.
    Gracias Nancy, de verdad que tu cercanía aviva el fuego del carisma claretiano en mi vida
    Tú amiga y hermana
    Judith Vanessa García
    Seglar Claretiana
    Comunidad Manuel de Jesús Subirana

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  2. el amor no tiene un rostro, es un mosaico compuesto por todos los rostros del mundo...

    la solidaridad y el amor al projimo son sentimientos universales que se manifiestan mas cuando se pasa por un episodio dificil; solo prestando ayuda de manera desinteresada y recibiendola humildemente se puede lograr cualquier meta.

    saludos.

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